¿Sabías que la representación más antigua de la reflexología podal es el relieve de la tumba del médico egipcio Ankmahor datado 2.500-2.330 años a.C. y desde entonces se practicaba el masaje en puntos o zonas reflejas como tratamiento de dolores y disfunciones orgánicas?
Los beneficios de la reflexología son muchos, entre ellos ayudar a mejorar la salud en general, tanto a nivel fisiológico, emocional y anímico, aliviando dolores de espalda, cefaleas, estreñimiento, acumulación de líquidos, catarros, estimula el sistema inmunológico, disminuyendo la ansiedad… Permite reactivar el flujo de energía vital a lo largo del organismo para su equilibrio.
La reflexología podal es una técnica que estimula diferentes partes del cuerpo a través de presiones y movimientos de masaje específicos en los pies para cada estructura que queremos estimular.
Es importante ponerse en manos de un profesional para recibir un masaje de reflexología podal, pues el profesional conoce las contraindicaciones y puede dar una valoración muy específica para cada persona y caso. La reflexología podal es una práctica terapéutica que tiene al menos seis mil años de aplicación en varias culturas, entre ellas China e India donde también se evidencia su práctica en tiempos tan distantes como la del médico egipcio Ankmahor, esto nos lleva a pensar que la reflexología podal es una herramienta de sanación más antigua que la medicina convencional a la que estamos más habituados.
Los pies son un espejo del cuerpo.
Olga Ros es Graduada en Ostoeopatía por ISMET, Formada en Kundalini Yoga por la Escuela de yoga Anandpur (Barcelona), Diplomada en Hatha Yoga por la Escuela de yoga Kaivalya (Barcelona), Diplomada en Kinesiología por el Instituto del Doctor Guxens, Diplomada en Masaje Terapéutico y Reflexología Podal por el Instituto Cim. Terapeuta en Meridians en Barcelona de 2010 a 2016.
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