La toma de la temperatura durante todo el ciclo menstrual puede ser un gran aliado para el terapeuta de Medicina China, en el tratamiento de cualquier trastorno menstrual. Nunca mejor dicho, sirve como ‘termómetro’ del estado energético de la mujer.
A lo largo del ciclo menstrual hay variaciones de temperatura que son normales. El registro de estas variaciones en una gráfica es muy utilizado en temas de fertilidad y es conocida como la gráfica de temperatura basal corporal. Usualmente, esta gráfica se realiza para detectar la ovulación y aprovechar esta información como método anticonceptivo natural o para aumentar las posibilidades de embarazo.
Sin embargo, estas variaciones de temperatura dan información al terapeuta en Medicina China más allá del mero hecho de la ovulación. En la gráfica podemos evaluar el estado del Yin (la base material, la escencia, la sangre y los líquidos orgánicos), del Yang (la funcionalidad, el calor, la actividad) y de la circulación energética o Qi Ji, que intervienen en el equilibrio energético y hormonal del ciclo menstrual. Esta información será muy útil para la personalización y aplicación del tratamiento en cualquier trastorno, así como una herramienta de prevención global de la salud femenina. Las alteraciones en la gráfica también nos permitirán detectar de manera temprana posibles desequilibrios antes de que se manifiesten (no necesariamente relacionados con la salud ginecológica) y así poder tratarlos para prevenir futuras complicaciones.
La temperatura basal
Se llama temperatura corporal basal (TCB) a aquella que tiene nuestro cuerpo justo al despertar después de haber dormido por lo menos 3 horas (Lyttleton, 2009) y antes de realizar cualquier actividad (incluso beber un poco de agua).
Para evaluarla, cada mañana a la misma hora debe tomarse la temperatura en el mismo sitio siempre (oral, axilar o vaginal) con un termómetro de cristal (si es electrónico, debe ser específico para la toma de temperatura basal, ya que los termómetros regulares no son muy precisos) y anotarse en una cuadrícula que dará lugar a una gráfica. Si se ha tomado a una hora distinta del resto de días, también deberá anotarse, ya que la temperatura aumenta aprox. una décima por cada hora más tarde que nos despertemos.
En la gráfica ideal, la primera fase o fase folicular (que inicia con el primer día de menstruación) oscila entre los 36,2º y los 36,5ºC y debería mantenerse más o menos estable, con variaciones no mayores de 0,2º – 0,3ºC. En un ciclo menstrual de 28 días esta fase debería durar aproximadamente 14 días. Durante este periodo podemos evaluar principalmente el estado del Yin.
Luego aparecerá una elevación de temperatura de entre 0,4º y 0,5ºC. Este pico indica que la ovulación se ha producido, el Yin se transforma en Yang.
La segunda fase del ciclo o fase lútea viene después. Durante este tiempo la temperatura debe mantenerse elevada, es decir ente 0,3º y 0,5ºC más alta que durante la fase folicular, dando un patrón bifásico claro a la gráfica. La estabilidad y elevación de la temperatura en esta parte del ciclo nos indicará el estado del Yang. Si hay embarazo, la temperatura se mantendrá elevada. Si no lo hay, volverá a su nivel más bajo y aparecerá la menstruación, dando inicio nuevamente a la fase folicular.
Como decíamos antes, ambas fases deben mostrarse relativamente estables con variaciones suaves y mínimas. Sin embargo, cuando encontramos gráficas con picos muy pronunciados es frecuente que sean un reflejo de bloqueos en la circulación del Qi de Hígado y/o Corazón, que es posible que también se reflejen en estados emocionales alterados (irritabilidad, ansiedad, nerviosismo, etc.)
Con toda esta información el terapeuta en Medicina China es capaz de personalizar el tratamiento, adaptándolo a las necesidades del cuerpo en ese momento, bien sea necesario tonificar el Yin, el Qi o la Sangre, desbloquear la circulación energética o calentar para tonificar el Yang y conseguir el equilibrio.
Si quieres llevar un registro de tu temperatura basal puedes descargar este formato o utilizar alguna app de seguimiento menstrual que permita llevar el registro de la temperatura basal.
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Dardané González es Especialista en Ginecología y Fertilidad con MTC, Graduada en Medicina Tradicional China y Acupuntura por ISMET, Graduada en Quiromasaje por ISMET, terapeuta, docente y socia y co-directora de Meridians en Barcelona.
Referencias
Lyttelton, J. (2009). Tratamiento de la Infertilidad con Medicina China. Elsevier.
Matorras R., Hernández, J. Molero, D. (2008) Tratado de Reproducción Humana para Enfermería. Ed. Médica Panamericana
Dardané González
Especialista en Ginecología y Fertilidad con MTC, Graduada en Medicina Tradicional China y Acupuntura por ISMET, Graduada en Quiromasaje por ISMET, terapeuta, docente y socia y co-directora de Meridians en Barcelona. Más información
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