La Medicina Tradicional China (MTC) se vale de 4 herramientas para realizar el diagnóstico de los síndromes de desarmonía que pueden aquejar a una persona. A través del interrogatorio, la observación, la palpación y la olfatoaudición, el terapeuta de MTC determina el estado del Qi, la Sangre, los líquidos orgánicos y la capacidad funcional de los órganos y entrañas.
Muchos de los síntomas y signos que para la Medicina convencional son irrelevantes (incluyendo aquellos puramente subjetivos), para la MTC pueden ser indicadores de que algo está en desajuste.
Giovanni Maciocia dice en su libro Los Fundamentos de la Medicina Tradicional China: “La correlación entre los síntomas externos y los órganos internos se resume en la expresión: ‘Inspecciona el exterior para examinar el interior’. Según esta idea básica subyacente en el diagnóstico chino, prácticamente todo, como la piel, tez, huesos, canales, olores, sonidos, estado mental, preferencias, emociones, lengua, pulso, comportamiento, constitución corporal, refleja el estado de los órganos internos y puede ser empleado en el diagnóstico”.
En esta ocasión nos centraremos en la palpación. Sentir con nuestras manos el cuerpo del usuario nos da una información muy valiosa para el diagnóstico. En MTC se palpa el pulso, la piel, las extremidades, pecho y abdomen y los puntos de acupuntura.
El pulso, una de las particularidades de la MTC
En cada sesión de MTC verás que, además de hacerte una serie de preguntas sobre tu estado general, tu terapeuta te pedirá observar tu lengua y palpará tu pulso radial en ambas muñecas.
Aunque el pulso está sujeto a influencias externas a corto plazo –como haber corrido justo antes de iniciar la visita, haber sufrido un disgusto unas horas antes o incluso la edad y las estaciones del año–, este aporta al terapeuta una información muy detallada del estado energético de los órganos, del Yin y Yang, de la Sangre y del Qi, de una forma global. Es una habilidad muy sutil y requiere de muchísimo entrenamiento por parte del terapeuta.
Según el “Clásico de las Dificultades” (hacia el año 100 d.C), debe palparse el pulso de la arteria radial colocando 3 dedos a partir del pliegue de la muñeca además de observarse sus características en tres profundidades –superficial, medio y profundo– y, según estableció el “Clásico de los Pulsos” (280 d.C), cada posición dará información sobre un órgano en concreto. Observamos distintas características, además de su profundidad, notamos la resistencia de la arteria a la presión, si se siente tenso como una cuerda o, por el contrario, es más bien blando, si se nota deslizante «como las perlas en cuenco», si es regular o no y su velocidad entre otras características más sutiles
Palpación de manos y pies
También es posible palpar la mano para obtener información diagnóstica. Existe un mapa de puntos reflejos tanto en manos como en pies que pueden alertar de desequilibrios en ciertos órganos o sistemas.
El diagnóstico se realiza presionando los puntos en este “mapa” y las sensaciones molestas o dolorosas nos darán información valiosa.
Palpación del pecho y del abdomen
En el pecho podemos percibir el latido cardiaco. Un latido regular, ni tenso ni rápido revelará que el Qi de Reunión o Qi del Pecho (Zong Qi) están en buen estado. Si el latido es débil, indicará una insuficiencia de Qi de Reunión, si por el contrario es demasiado fuerte, hablaremos de un exceso o hiperactividad. Si el latido no se llega a palpar, habrá Flema o hernia de hiato.
En cuanto al abdomen, podremos observar si hay zonas más tensas que otras, si hay dolor o molestia a la presión o si por el contrario las molestias abdominales se alivian cuando apretamos. También podremos evaluar el tono muscular y si hay masas abdominales palpables.
Palpación de puntos y meridianos
Otra de las técnicas de diagnóstico es la palpación de los puntos y meridianos de acupuntura. En términos generales, cualquier dolor agudo, ya sea espontáneo o a consecuencia de la presión en el punto, indica que hay una Plenitud del órgano al que está asociado el punto. En cambio si el dolor es sordo, indicará una condición de Insuficiencia.
Para el diagnóstico se suelen palpar los llamados Shu de espalda, los puntos Mu ventrales o anteriores, los puntos He Mar y los puntos Ah Shi.
¿Qué más podemos percibir a través de la palpación?
En términos generales, la palpación también nos servirá para notar diferencias de temperatura en distintas zonas del cuerpo, la textura de la piel, si está hidratada, seca o incluso sudorosa… Y todos estos detalles nos servirán para complementar el panorama global al que nos enfrentamos con este usuario.
Además, la palpación es una forma de establecer un ‘CON-TACTO’ más cercano con nuestros usuarios. Aporta cercanía, permite mostrar nuestra empatía y abre canales de comunicación para poder establecer un diagnóstico más certero y próximo con nuestros usuarios.
Te invito a echar un vistazo también a estos artículos que he escrito sobre el tema:
Referencias:
MACIOCIA, G. (2007) Los Fundamentos de la Medicina China. Aneid Press
Fotografía: Penny Mathews
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Dardané González es Graduada en Medicina Tradicional China y Acupuntura por ISMET, Graduada en Quiromasaje por ISMET, terapeuta, docente y directora de comunicación en Instituto Meridians en Barcelona.
1 Comentario
julio mendoza venezuela junio 15, 2016
muchas gracias por su ayuda hice curso de acupuntura con el Dr sawaya mi gran amigo que siempre me ayudo con mi mama y mis amigos Dios los tenga en la gloria.
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