Los que nos dedicamos a la Medicina Tradicional China, sabemos que el Corazón (Xin) es el filtro por donde pasan todas las emociones. La energía del corazón, el fuego, es la expresión de ellas y posee el don de transformarlas.
El exceso de carga negativa con la que se puede ver expuesto, hace necesario su balance.
Aligerar el peso con el disfrute que nos ofrece el arte y la naturaleza por ejemplo, escuchar música o leer un buen libro, puede tener un efecto terapéutico o de bálsamo para nuestras emociones.
De esta manera activamos un cambio en nuestra carga energética, movilizando la energía del corazón. Del bloqueo que produce la energía densa que emana de la negatividad cambiamos a una energía ligera que fluye y no se estanca.
Nutrir al corazón con emociones positivas ayuda a aliviarlo de su carga, a hacer más ligera la existencia, a no ser tan vulnerables al miedo, y por ende, promueve la salud y el bienestar.
En días de sucesos tristes esta nutrición positiva no nos llega con facilidad, así que tenemos que tomar parte activa para promoverla. Hagamos el primer paso, busquemos qué nos conmueve, qué nos produce admiración y enciende esa llama, la que genera endorfinas para hacernos sentir optimistas, agradecidos y más felices, alejando con ello al miedo y la ansiedad.
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Irene Bielsa es Diplomada en Medicina Tradicional China por el Instituto Superior de Medicinas Tradicionales (ISMET). Terapeuta de medicina china y shiatsu en Meridians en Barcelona. Monitora de Qi Gong.
Links de interés:
Cuando las emociones nos enferman
Por Irene Bielsa |13/11/2018
