El mundo de la cocina puede volverse mucho más divertido y variado si conocemos y practicamos el gran abanico de estilos de cocción y preparación de alimentos. A parte de proporcionarnos más riqueza en la cocina, esta variedad de estilos de cocción y preparación nos permite generar diferentes efectos de los alimentos en nuestro cuerpo.
¿Por qué no tiene el mismo efecto energético una zanahoria hecha al vapor que una zanahoria hecha al horno o cruda en licuado?
Aprender los efectos de cada estilo de preparación y cocción permite a la persona convertirse en una especie de Alquimista en su cocina que prepara el alimento según el efecto que desea obtener para así equilibrar su estado energético y de salud.
Existen 4 estilos de preparación sin fuego y 10 estilos de cocción. Hay personas que siempre tienen calor, están sofocadas. Hay personas que padecen mucho el frío. Otras desean depurar grasas, otras ganar peso. Unas relajarse, otras generar movimiento en sus vidas, etc.
1. Germinado
Efecto: abre, enfría, efecto de ligereza, depuración.
Ingredientes indicados: semillas de alfalfa, cebolla, rabanitos, col lombarda, bróquil… Los de legumbres, como la soja o lenteja, es mejor cocinarlos un poco ya que son legumbre y pueden generar malestar y flatulencias.
2. Macerado
Efecto: abre, enfría – para días calurosos. Su sabor es más dulce y crujiente que crudo.
Ingredientes indicados: cualquier verdura, tofu fresco, tempeh, pescado.
3. Prensado
Efecto: enfría, es crujiente, más dulce y con menos contenido de agua que crudo.
Ingredientes: cualquier clase de verdura que sea dura y jugosa como el rabanito, el pepino, el nabo.
4. Fermentado corto o pickle o encurtido
Efecto: regenera la flora intestinal, rica en vitaminas B y C.
Ingredientes: cualquier clase de verdura un poco dura: col, zanahoria, rabanitos, coliflor. Se fermentan en sal no en vinagre.
5. Escaldado
Efecto: aligera, refresca, activa, es crujiente.
Tiempo: de 10 a 15 segundos, con abundante agua hirviendo.
Ingredientes: cualquier verdura, cortada finamente.
6. Hervido
Efecto: aligera, refresca, nutre y activa la parte superior y superficial del cuerpo.
Tiempo: durante unos 3 – 7 minutos, con abundante agua hirviendo.
Ingredientes: variedad de verduras, algas finas.
7. Salteado corto – wok
Efecto con agua: aligera, activa, da sabor dulce. La verdura queda crujiente.
Efecto con aceite: aligera, calienta suave, activa, genera movimiento.
Ingredientes: cualquier clase de verduras, cortadas muy finas.
8. Plancha
Efecto: calienta de forma superficial, activa, nutre. Muy sensorial.
Ingredientes: verduras, pescado, seitán, tempeh, tofu. Cocidos previamente o no.
9. Frito
Efecto: calienta superficialmente, activa, estimula, dinamiza. Muy sensorial.
Ingredientes: cualquier clase de verduras, proteínas vegetales, pescado.
10. Vapor
Efecto: aligera, relaja, calma, nutre el plexo solar, realza el sabor dulce de las verduras.
Ingredientes: cualquier clase de verduras.
- Para crear el vapor, siempre ha de estar puesta la tapa y la llama media.
11. Estofado – con agua
Efecto: calma, refuerza, calienta más el interior del cuerpo. Duración de 30 minutos mínimo.
Ingredientes: principalmente verduras redondas y de raíz (calabaza, col, coliflor y zanahorias, chirivía, nabo), cortadas en trozos grandes. Es posible añadir proteínas vegetales (tofu, tempeh, seitán) o pescado hacia el final de la cocción.
12. Presión
Efecto: da energía, refuerza y concentra, es dulce. No apto para personas con sobrepeso, con tensión alta, calor.
Ingredientes: cualquier clase de verduras, algas, cereales, legumbres, proteínas vegetales…
- Este estilo no debería utilizarse sólo para ahorrar tiempo. Se debe tener en cuenta su efecto y utilizarlo cuando se necesite.
- No es recomendable usarlo frecuentemente para verduras. Es mejor utilizarlo para la cocción de ingredientes muy densos (como cereales y legumbres) y que requieren un efecto más penetrante.
13. Salteado largo – sin agua
Efecto: refuerza, calienta interiormente, ideal para estaciones frías, genera dulzor natural.
Ingredientes: verduras de raíz (zanahoria, chirivía, nabo, rabanitos) o verduras redondas (calabaza sobretodo), algas y, también, proteínas vegetales.
14. Horno
Efecto: calienta muy profundamente, seca, contrae, da una energía más bien estática, pesada.
Ingredientes: verduras, frutas, tofu, pescado.
- El alimento cocido en el horno actúa proporcionando, desde el interior hacia el exterior, un calor muy profundo y penetrante, una energía muy condensada y pesada. No es recomendable usar el horno a diario y es mejor hacerlo en climas fríos.
15. Barbacoa, ahumado, fermentado largo
Estos tres últimos estilos de preparación, no se detallan tan específicamente como los anteriores, ya que su uso no es muy frecuente.
Referencias
Bradford, M. (2009) La nueva cocina energética. Ed. Océano.
___
Helena González es Graduada en Medicina Tradicional China y Acupuntura, Diplomada en Alimentación Natural y Energética por la escuela de Montse Bradford, Graduada en Dietética Oriental y Naturista por IES Roger de Llúria, Profesora y coordinadora de la escuela de Montse Bradford, Profesora de Alimentación Natural y Energética en la escuela Mens Venilia (Barcelona) y el centro cultural Casa Elizalde (Barcelona) y terapeuta en Instituto Meridians en Barcelona
___
0 Comentarios
Deja uncomentario