Cómo evitar los gases intestinales con tus hábitos alimentarios

Muchas personas sufren de gases intestinales a diario o de forma frecuente. Suelen aparecer después de las comidas, aumentando o apareciendo con la ingesta de ciertos alimentos o de forma habitual, coman lo que coman. ´

También hay personas que comentan que según cómo comen, se generan más gases: comidas de trabajo, comer con poco tiempo, comer de pie…

Los gases intestinales pueden producirse por:

1. Aire deglutido: son la mayoría y desaparecen tras unos eructos.
2. Actividad bacteriana: se producen en el intestino grueso (dióxido de carbono, metano e hidrógeno). Se pueden producir de 7 a 10 litros de gas al día, y se expulsan sólo alrededor de unos 600 ml. El resto se absorbe a través de la mucosa intestinal. Favorecen las fermentaciones bacterianas los alimentos que llegan parcialmente digeridos al intestino grueso [IG] (por poca masticación y/o falta de energía digestiva). El estreñimiento también favorece este tipo de gases.
3. Difusión de los capilares sanguíneos hacia el interior del tubo digestivo (luz del intestino). Es menos frecuente.

Hábitos y consejos para sanar los intestinos y evitar la producción de gases:

• Masticar muy bien los alimentos. Comer tranquilamente y con tiempo. Si no se dispone de suficiente tiempo es preferible reducir la cantidad de alimentos y hacer algo más ligero tipo snack antes de engullir los alimentos. Si el alimento llega poco triturado al intestino grueso se generaran más gases.
• Evitar comer mucha cantidad en una misma comida para así respetar nuestra capacidad enzimática y capacidad de digestión. Lo ideal es saciarnos en un 80%, no comer hasta estar totalmente llenos.
• Introducir la raíz de jengibre fresca en las comidas (en sopas, salteados de verduras, estofados), en forma de jugo para estimular las secreciones digestivas (se ralla y se escurre la pulpa). No tomar en caso de problemas de piel (picores, eccema, urticaria…)
• Evitar comer fruta en las comidas o justo después de las comidas ya que fermentan muy rápido y contribuyen a expandir intestinos. Si se toman, en caso de gases intestinales, siempre mejor cocinadas (compota, horno, plancha) que crudas y fuera de las comidas.
• Evitar alimentos y condimentos como:
  • Verduras crudas como lechuga, tomate, pepino, aguacate (poco), espinacas, cebolla, champiñones.
  • Especias: pimienta, ajo, currys, pimentón…
  • Alga agar-agar. Si se usa siempre hay que combinarla en la misma receta con el kuzu (espesante natural).
  • Tofu natural, leche o yogur de soja – provienen de la soja que es una legumbre y no está suficientemente cocinada en estos productos, sino prácticamente cruda.
  • Exceso de proteína animal – carne blanca, roja y embutidos principalmente, ya que causan putrefacción y así se generan más gases.
  • Lácteos y quesos.
  • Glúten, presente en cereales como el trigo, espelta o kamut, cebada o avena. Conviene cuando hay gases de forma habitual, dejar de consumir alimentos con gluten durante 1 mes para ver si hay mejoría. Y suele haberla.
  • Exceso de fruta cruda y fruta tropical o cítricos.
• Tomar una Infusión carminativa para ayudar a expulsar los gases: mezcla de hinojo, anís estrellado y comino. Tomar a diario después de comida y cena hasta mejorar los síntomas.
• Cocinar muy bien las legumbres. Dejarlas en remojo, cocinarlas con alga kombu y un poco de comino en polvo. Si aún así dan gases se pueden pasar, una vez cocidas, por el pasapurés manual para eliminar un poco las pieles (que es lo que produce los gases). La legumbre en unos intestinos sanos no da problemas de flatulencias.

Referencias

BRADFORD, M. (2013) La Alimentación Natural y Energética. Ed. Océano.

CUEVAS, O. (1999) El equilibrio a través de la alimentación . I.F.P. Sanitario Roger de Llúria, www.rogerdelauria.com

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Helena González es Diplomada en Medicina Tradicional China por el Instituto Superior de Medicinas Tradicionales (ISMET). Diplomada en Alimentación Natural y Energética por la escuela de Montse Bradford y graduada en Dietética Oriental y Naturista por IES Roger de Llúria. Profesora titulada de la escuela de Alimentación Natural y Energética de Montse Bradford. Profesora y terapeuta en Instituto Meridians en Barcelona de 2010 a 2017.