Foto: Ben Earwicker
Garrison Photography, Boise, ID
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Este artículo es para recordarnos que la fisiología del organismo humano nos condiciona a estados emocionales dependiendo del tipo y calidad de vida que llevamos. A todos aquellos que se hacen responsables de su cuerpo, practicando deporte, aumentando su energía vital a través de técnicas ancestrales como el Yoga, Taichí, Chi Kung (Qi Gong)… los que cuidan de su alimentación nutriendo el cuerpo y no sólo comiendo para saciar el hambre… que reciben masajes para liberar tensión, sesiones de acupuntura para equilibrar el flujo energético, que visitan al osteópata, al nutricionista, al terapeuta emocional… les ayudará a seguir dando sentido a su compromiso con su salud y bienestar.
A los que todavía siguen en esa vorágine de estrés y miedo, que el hecho de cuidarse y responsabilizarse de su salud es su última prioridad, que tienen prisa y prefieren la “pastilla” que lo resuelve todo más rápido, este artículo tal vez les ayude a girar las velas y a decidir iniciar un nuevo camino.
Adrenalina y Serotonina
Seguro que todos hemos oído hablar de estos neurotransmisores; pues bien, recordar que los niveles bajos de serotonina se asocian a trastornos como la ansiedad, trastornos obsesivo-compulsivos, depresión, agresividad, esquizofrenia, insomnio, incluso hiperactividad. Cuando aumenta la serotonina y se produce una mayor concentración de esta mejora la autoestima, la persona está relajada, con sensación de bienestar y plenitud. La Serotonina aumenta de forma natural, con la práctica de técnicas de relajación, yoga, meditación, tratamientos terapéuticos naturales, alimentación equilibrada, haciendo ejercicio con cierta regularidad, pasear, bailar, andar al aire libre. La serotonina participa en elevar el ánimo, aumentar las defensas del sistema inmune, aumentar el impulso sexual, así como la esperanza del tiempo de vida.
La Adrenalina pone tu cuerpo en marcha para correr (eso funcionando como hormona) y como neurotransmisor te permite, en esa situación de estrés, no quedarte parado y pensar ¡a correr!. Pero en niveles altos derivados de el estrés y la prisa, produce fatiga, insomnio (debido a que la adrenalina disminuye los niveles de Dopamina –neurotransmisor que nos ayuda a descansar y a conciliar el sueño–), ansiedad, dolores, depresión….
Serotonina y Adrenalina comparten el mismo receptor en las células y eso quiere decir que si las células reciben adrenalina la serotonina se queda sin receptor. Una persona con altos niveles de estrés, o estrés sostenido durante mucho tiempo, no pueda sentir felicidad, plenitud y, por lo tanto, darle un sentido a la vida, o Estrés o Felicidad… Aunque te vayas a una isla de cocoteros, si hay un alto nivel de estrés, te costará alcanzar la sensación de paz, de conexión y el poder disfrutar plenamente. Adrenalina o Serotonina.
Cuestión de Química
Es cuestión de Química, aunque a muchos nos vence la Fe, es importante comprender como funcionamos para que le demos un sentido más profundo a lo que nos sucede y potenciemos nuestra salud y nuestra energía vital, pues sin ella nos queda estrés, miedo y tristeza.
La felicidad interna va más allá de lo material, tiene un coste y ese coste es tu responsabilidad contigo mismo.
¿Porqué esperar a las vacaciones para sentirnos felices, relajados y plenos? Aprender a regular el estrés cada día, es VITAL para tu Salud Física y Emocional. Lo que ocurre dentro ocurre fuera, todo empieza en ti.
Referencias:
Ira Fox, S. (2011) Fisiología humana. McGraw-Hill
de Castro del Pozo, S. (2006) Manual de patología general. Elsevier
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Olga Ros es Graduada en Ostoeopatía por ISMET, Formada en Kundalini Yoga por la Escuela de yoga Anandpur (Barcelona), Diplomada en Hatha Yoga por la Escuela de yoga Kaivalya (Barcelona), Diplomada en Kinesiología por el Instituto del Doctor Guxens, Diplomada en Masaje Terapéutico y Reflexología Podal por el Instituto Cim. Terapeuta en Meridians en Barcelona de 2010 a 2016.
