Es muy posible que cuando has visitado a tu acupuntor/a o terapeuta en Medicina China hayas oído hablar de que existen el calor por exceso y el calor por insuficiencia (o Insuficiencia de Yin).
En este artículo te explicaré de forma sencilla de qué se trata. Como ya hemos explicado en el artículo “El equilibrio Yin y Yang”, esta pareja hace referencia a dos cualidades de la energía que son interdependientes y complementarias entre sí. En todo lo que nos rodea y en nosotros mismos podemos observar esta dualidad constantemente.
Podemos asociar al Yang a diversos conceptos: energía, día, actividad, calor, luz, movimiento y al Yin a ideas como: sustancia o materia, noche, frescor, oscuridad, líquido, pesado… Y estas dos energías se equilibran una a la otra, el “agua” del Yin impide que el “fuego” del Yang lo queme todo y el “fuego del Yang” calienta y activa al Yin para que este no se estanque. Cuando estas dos energías están en equilibrio, nosotros también. Sin embargo, es frecuente que nos encontremos con que en una persona predomine una sobre la otra.
El predominio puede ser de tipo “exceso” si lo que sucede es que se agrega una energía de tipo Yang a la propia, en ese caso nos encontraremos ante un exceso de Yang. En este caso el calor será muy evidente, la persona tendrá sensación de calor durante todo el día, cara y ojos rojos, boca amarga, mucha sed con preferencia por bebidas frías, posiblemente con dolor de cabeza, irritabilidad, agitación mental, pesadillas, estreñimiento, erupciones cutáneas de color rojo, sangrados (por la nariz, rectales, gástricos, de encías…) con sangre de un tono rojo muy vivo.
Los casos de calor por exceso suelen manifestarse por una exposición intensa o prolongada a fuentes de calor, como estar mucho tiempo bajo el sol sin suficiente protección e hidratación, por una dieta inadecuada o por problemas emocionales que a la larga generan Fuego. Hay que recordar que todos los patógenos externos (Frío, Sequedad, Humedad, Viento…) pueden transformarse en calor, provocando cuadros con fiebre alta y mucha sed, entre otros síntomas.
Por otro lado, podemos encontrarnos con síntomas de calor pero por “insuficiencia”, es decir, el Yin no es capaz de refrescar el fuego del Yang para mantenerlo en equilibrio y aparecen síntomas de calor, pero en las que no es que “sobre” fuego si no que falta Yin para controlarlo. Hay algunos síntomas muy característicos de la insuficiencia de Yin, como pueden ser sofocos, mejillas rojas, sudor nocturno, insomnio, sed con ganas de beber a pequeños sorbos, sequedad, inquietud sobre todo por la tarde/noche, con frecuencia hay debilidad lumbar y es posible también encontrar una subida de la libido. La insuficiencia de Yin proviene de un desgaste de la energía básica (principalmente de Riñón e Hígado, aunque puede haber otros órganos física o energéticamente afectados como Corazón, Pulmón y Estómago). Es muy frecuente en personas que trabajan de noche por periodos prolongados –momento del día en que deberíamos descansar y reponer el Yin–; así como en casos en que hay una enfermedad crónica, actividad sexual excesiva o pérdida de sangre prolongada (como en las mujeres con menstruación muy abundante).
En la práctica clínica es muy importante diferenciar a qué tipo de calor nos enfrentamos, ya que los principios de tratamiento para uno y otro caso, son distintos. Si hay calor por exceso tendremos que aclarar el calor y si se trata de calor por insuficiencia, lo indicado es nutrir el Yin; utilizaremos puntos de acupuntura y materias de fitoterapia distintas según el caso.
Recomendaciones para aclarar el calor
- Protegerse de las fuentes de calor intenso (sol, hornos, espacios muy calurosos, sauna en exceso)
- Hidratarse adecuadamente.
- Alimentos de naturaleza fría-fresca y neutra, en especial los de sabor dulce, ácido y salado (consulta la tabla de clasificación de alimentos según la Medicina China). Ej. Menta, pepino, sandía, melón.
- Evitar las comidas calientes y muy picantes.
- Regular las emociones a través de la meditación, la práctica deportiva, terapia…
Recomendaciones para nutrir el Yin
- Prevenir la sudoración excesiva (por ejemplo, por ejercicio extenuante o el uso del sauna).
- Alimentos del mar (mariscos y crustáceos).
- Semillas, especialmente sésamo negro.
- Frutas, como uva, ciruela, dátil, manzana, albaricoque.
- Verduras, como apio, pepino, espárrago, alcachofa…
- Conviene evitar los alimentos de sabor amargo, picantes y de naturaleza caliente (ej. Café, pimienta, canela, jengibre, chile, ajo, ginseng, cordero…)
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Referencias:
MACIOCIA, G. (2007) Los Fundamentos de la Medicina China. Aneid Press MACIOCIA, G. (2004) Diagnosis in Chinese Medicine. Elsevier EYSSALET, J. M., GUILLAUME, G., MACH-CHIEU. (2005) Dietétique ènergètique & médecine chioise. Édition DésIris. Paris. GUERÍN, P. (2000). Dietoterapia energética según los Cinco Elementos de la Medicina Tradicional China. Miraguano Ediciones.
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Publicado originalmente 03/06/2014
Dardané González es Graduada en Medicina Tradicional China y Acupuntura por ISMET, Graduada en Quiromasaje por ISMET, terapeuta, docente y directora de comunicación en Instituto Meridians en Barcelona.
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